Fabio Quartararo ya no es un joven de 26 años, pero conserva la frescura de sus primeros pasos en MotoGP y el deseo de volver a lo más alto. Si es posible, con Yamaha, cuyas promesas no se han cumplido, y si no, con una moto lista para intentar ganar en cuanto la pruebe, en lugar de desarrollar un nuevo proyecto. El francés lo deja claro en esta entrevista con AS, que incluyó en su apretada agenda del GP de Alemania, donde consiguió un podio al sprint.
– ¿Alguna vez has sentido miedo?
«No diría eso. Mira, de pequeño, tuve un accidente que me asustó mucho, porque me aplasté doce vértebras y me fracturé la mano y el brazo en veinte pedazos. Tenía miedo, sí, pero lo primero que hice al volver a subirme a la moto fue dar ese salto desde donde me había caído, porque era en una moto de motocross.»
—¿Cuántos años tenía entonces?
«13. No sé cuántas caídas he tenido a lo largo de mi vida, porque llevo pilotando desde los cuatro años, unas 150 o quizá más. Uno se acostumbra con el tiempo, aunque claro, algunas duelen más que otras.»
Sobre todo en la clasificación, que es mi punto fuerte, se me apaga la cabeza
—¿Nos explicarías esta frase?
«Al salir de boxes, que es una vuelta que no cuenta y donde se prepara el neumático, me doy cuenta de que estoy nervioso, muy nervioso, pero en cuanto llego a la última curva antes de empezar la vuelta rápida, todo pasa. Es como cuando tienes dolor de cabeza o de estómago y se te pasa, bueno, así, pero en medio segundo. Y cuando das la vuelta y terminas, te das cuenta de que estás loco, pero un loco cuerdo.
– Gostaría pelear con Márquez con una buena moto. ¿No te duele más que las propias caídas?
«Duele un poco más. Es un año un tanto extraño y difícil, porque conozco mi velocidad a una sola vuelta y sé los problemas que tenemos para ser buenos en carrera. Nuestra moto es muy delicada según las condiciones. De un día para otro, según el frío o el calor que haga, la moto es completamente diferente. En una sola vuelta, no piensas en la temperatura de los neumáticos ni nada, pero en carrera, tengo que pensar que ahí es donde perdí el rumbo en carreras como Assen. La moto se movía y no tenía agarre, lo que aumenta los problemas de velocidad y afecta aún más al grupo.»
-Dicen que Yamaha te prometió cosas que aún no has visto. ¿Cómo lo afrontas?
«Bueno, hemos mejorado. El año pasado, mi mejor resultado en la Q2 fue un séptimo puesto, y ahora hemos conseguido cuatro pole positions y cinco primeras filas, pero el mayor reto ahora es conseguirlo en carrera. La gente piensa que Fábio solo es rápido a una vuelta, pero no es así.»
¿Qué opinas de Marc Márquez y su camino hacia su noveno título?
«No creo que haya nadie al nivel de Márquez hoy en día. Y no me refiero solo a ahora, sino a los últimos diez años. Es bueno en todo: en mojado, en seco, con un brazo lesionado, con el otro… Es rápido en cualquier circunstancia y es un modelo a seguir, porque hay cosas con las que tengo dificultades, como cuando me topo con superficies mojadas. No me siento tan cómodo como él, y él es bueno en todo. Es como el FIFA, donde puedes tener a todos tus jugadores con el dorsal 99.»
¿A qué nivel estarías contra Marc con la misma moto que él?
«En condiciones inusuales, es casi imbatible, pero en seco podemos causar algunos problemas. En términos de velocidad pura, tengo el potencial para ser muy rápido.»
– ¿Qué quieres para el futuro?
«Para el futuro, no quiero un proyecto, sino una moto terminada. Quiero una moto que pueda luchar por ganar desde la primera carrera.»