En medio de los rumores sobre una posible salida de KTM, el bicampeón mundial Pedro Acosta dice que prefiere «no imaginar» cómo le iría con la Desmosedici. El dominio de Ducati en el Campeonato Mundial de MotoGP disminuyó ligeramente en 2025, en comparación con 2024.
El año pasado, Ducati ganó todos los grandes premios excepto uno, mientras que en 2025, tras ocho rondas, ya ha sido derrotada en Francia (donde Johann Zarco ganó con una Honda) y en Gran Bretaña (donde Marco Bezzecchi ganó con una Aprilia).
Sin embargo, aunque Ducati ha sido derrotada en algunas ocasiones este año, también ha ganado seis de las ocho carreras iniciales y tiene un récord del 100 % en las Sprint. KTM, por su parte, no ha estado tan cerca de la victoria este año como lo estuvo en Aragón el pasado fin de semana, donde Pedro Acosta terminó cuarto detrás de un podio totalmente Ducati (el quinto de la temporada), pero aún así quedó a siete segundos del ganador.

Este resultado provocó la frustración de Acosta, que está en su primera temporada como piloto de Red Bull KTM Factory Racing.
Como resultado de su insatisfacción con los resultados de este año y también debido a la incertidumbre financiera a la que se enfrenta KTM desde finales de 2024, Acosta ha sido asociado con un cambio.
Estos rumores, naturales dada la percepción de la capacidad de Acosta, han incluido especulaciones sobre un cambio a Ducati.
Sin embargo, la RC16 y la Desmosedici GP son muy diferentes entre sí: mientras que la KTM se adapta bien a los derrapes y los movimientos, la Ducati prefiere mantenerse en línea recta para maximizar el tiempo de vuelta.
Es una diferencia de enfoque que plantea la cuestión de si Acosta, cuyo estilo extravagante parece adecuado a las características de la KTM, sería capaz de encontrar la comodidad necesaria para lograr los mejores resultados en Ducati.